miércoles, 15 de julio de 2020

Samay Huasi (Casa de descanso)

Continuación "Viaje de Locura" IV

Chilecito es una ciudad misteriosa...
Con decir que los asentamientos humanos son anteriores a la llegada de los españoles y que, como ciudad fundada por europeos, tiene muchos más años que nuestro propio país estaría sólo dando un pantallazo de su identidad.
La ciudad tiene más de trescientos años. Durante ese trascurso tuvo por lo menos tres nombres
Fue fundada en el año 1715 por el colonizador español Domingo de Castro y Bazán. Éste la bautizó como "Villa Santa Rita" Luego se llamó "Villa La Argentina" y finalmente "Chilecito", nombre que conserva hasta la actualidad. Algunas personalidades destacadas de nuestra cultura hicieron su paso por esta localidad y descansan en su campo santo, entre ellos el autor del famoso tango "Caminito"_ Coria Peñaloza y el Ilustre Joaquín V. Gonzalez.

El Ilustre Joaquín tenía aquí su residencia de descanso "Samay Huasi"que en lengua quechua significa "casa de descanso" hoy bajo la administración de la Universidad Nacional de La plata...

Una tarde decidimos visitar dicha residencia.



La sofocante tarde de verano riojano (chileciteño) asó mi humanidad durante los escasos siete minutos que nos llevó atravesar media ciudad y encarar por la Ruta provincial N 12 hacia el Este. Así que apenas encontré sombra acomodé la moto intentando guarecerla del embate de Febo. Me sorprende en el momento encontrar un obelisco en el lugar donde estacioné a "La Cafetera"...



Según reza su tumba "Ilustre y poderoso Joaquín Víctor Gonzalez" traspasando este portal ingresamos a un mundo mágico.


Y como ingresando a aquellas antiguas escuelas de misterios griegos traspasamos el umbral...





Caminando unos metros por ese entorno mágico nos topamos con la "Puerta Etrusca"














Siguiendo por la entrada principal llegamos al jardín en donde cofluyen La Casa, El museo y La residencia de la Universidad




El guía que nos acompañó en la visita abundó en explicaciones y respondió nuestras preguntas, pero ésos detalles se los dejo para cuando cada uno visite este hermoso lugar.










Inti mostraba su dominio (como todas las tardes desde que llegué) Entonces el guía nos recomienda visitar primero el museo. Atento a la ideoneidad del encargado y por sugerencia de mi musa decido acatar la recomendación.










En el museo encontramos muchas cositas interesantes muy ilustrativas de la inquieta vida de Joaquín y de su gran obra de investigación naturalista, científica, y geológica con algunos elementos simbólicos emergentes.

Gatito...
Gatito...


Interesante escalera caracol que lleva desde el recinto (en el subsuelo) hasta la cámara superior...
Escalera caracol

El prócer y yo...
















Aunque parezca mentira creo que nos parecemos... Siento que muchas cosas me unen a este ilustre argentino. Muchos intereses y vivencias en común. Nos separa un siglo de historia de nuestro país. Nos acerca (además de mi admiración por él) una filosofía, una intención en común, un mismo espíritu aventurero, buscador y místico. Nos une hoy la geografía, el camino que dejó más allá de su sepulcro al que llego en mi periplo. Nos enlaza esa palabra que ambos buscamos en distintos tiempos pero en la misma senda...





Salimos de museo, cruzamos nuevamente el hermoso patio central y nos asomamos a "La casa" Ahí vemos la habitación donde descansaba el fundador de la Universidad Nacional de La Plata y autor del libro "Mis montañas" (entre tantas otras cosas y tantos otros libros)


Seguidamente como conducidos por un túnel del tiempo que nos trasladó aún más al pasado caminamos por una extensa glorieta cubierta por un magestuoso rosedal.
Del otro extremo (además de calor) nos esperaba un lugar de ensueño


El pensador
Anfiteatro






















Trono del Inca
Avenida de los siete sabios griegos


























Puerta de Micenas

Vista del "Cristo del Portezuelo" desde el fondo de la finca

La sensación de esta visita es muy agradable. Un lugar paradisíaco que te invita a entender lo que sentía Joaquín V. Gonzalez cada vez que regresaba a Chilecito. Un museo que muestra su obra y un parque con estructuras magníficas que transportan nuestro espíritu a otros tiempos y lugares maravillosos.

Digna de su nombre "Samay Huasi" la Casa de Descanso de nuestro querido Joaquín.







lunes, 15 de junio de 2020

Enero 2017_Capayán (buscando rastros de la historia anterior)

Continuación "Viaje de Locura" III

La Cafetera no arranca desde hace varios días... busco el origen del fallo

Tras varios días de descanso intento montar a la Cafetera, pero no responde... (Dejo librada a vuestra imaginación lo hechos acaecidos durante esos días)


Acá tá!!! El corte de embrague. Busco el repuesto, lo cambio y arranca lo más bien.
Una vez solucionado el inconveniente recorremos la ciudad Atravesando Chilecito de Norte a Sur. Cabe destacar que la ruta Nac. N 40 desaparece dentro de la ciudad. Ingresa a la misma como Av. Presidente Perón, se difumina en calles "de pueblo" y renace hacia el norte como Av. Pelagio B. Luna. 

Atravesando la ciudad de Sur a Norte


Avenida Pelagio B. Luna (RN 40) desde "Casa de Piedra" hacia el norte

Vista de la ciudad de Chilecito desde la Estación N 2 de "La Mejicana"

Tramo de cablecarril




Luego de algunas recorridas Graciela me lleva a conocer Tilimuqui, pequeño poblado en uno de los distritos... (en un relevamiento de 1810 ya figura Tilimuqui como asentamiento poblado)
Vinedos en Tilimuqui



En la finca "La Urbana" de fondo se aprecia "El Velazco" o "La Sierra de Velazco"





Conociendo un poco de la historia previa a la fundación de la Ciudad (1.715)




 El día apacible y cálido (por estas latitudes el cálido es tórrido por algo también se conoce a la región como Torrontés). Entonces Graciela me invita a conocer "Las ruinas de Capayán" antiguo asentamiento donde existía (en épocas de la colonia) un horno de fundición de plata.









 A poco de cruzar el límite con el departamento de Famatina encontramos un arco que indica un sitio de interés. ingresamos por un camino bastante en mal estado y en pésimas condiciones luego de un tramo... la distancia es bastante, el camino confuso y cada vez en peor estado... En algunas partes Graciela debe bajar de la moto para poder zanjar el paso. Mucha arena, zanjas aluvionales, piedras grandes...


 Rumbo a las ruinas de Capayán en el departamento de Famatina, La Rioja.




Luego de un tiempo medible en eternidades históricas se vislumbran unas construcciones casi ocultas entre el follaje xerófilo del paiseje semiárido... 
Llegando al sitio arqueológico "Ruinas de Capayán"
El lugar en sí es lo que queda de un caserío con diversas estructuras  al estilo colonia o villorio.
Luego de una observación "a vuelo de pájaro" viendo que no extiste sombra para guarecerse del embate estival del Inti no queda otra que retratar a mi compañera de ambos perfiles...

La Cafetera y de fondo el declive de la Sierra de Velazco

El otro perfil y de fondo el declive de la Sierras de San Nicolás hacia Plaza Vieja
La ruinas son lo que queda de edificaciones de adobe, lo que a mi entender demuestra el origen hispano de de las mismas, ya que las construcciones prehispánicas tenían dominancia de piedra.


La Cafetera vista a través de un hueco en una pared centenaria...
 

No existe una garita de informes (estamos en una zona completamente rural) Sí un monolito que el tiempo se encarga de mimetizar con el entorno centenario. 
 






En un costado llama mi atención un tiradero... al acercarme descubro un tesoro olvidado. Restos de cerámica que no levantó ningún arqueólogo ni parecen formar parte de una cuidada instalación de sitio. Las observo. Levanto un pedazo de esquirla y lo arrimo a mi mejilla y oído... Escucho los saberes de su silencio milenario y con solemnidad ritualística la deposito en el exacto lugar y posición que estaba antes. Devolviéndola a su tumba de siglos (o tal vez de sólo unos días imposible saber)
Cerámica de época hallada en el lugar


El viento hace una pausa e intento imaginar el asentamiento en sus años de actividad... Aún con los gritos de niños milenarios en derredor y de hombres y mujeres entregados a las tareas de ordenamiento y subsistencia del poblado sólo oigo silencio. 

Silencio y soledad.

...y pienso en lo duro que debe haber sido la existencia por aquellos años en este lugar.





 
 


Me sorprende que hace más de trescientos años se haya podido vivir en esta geografía






Luego de salir del trance meditatorio obervo en otro ángulo y el paisaje cambia encontrando la hermosa representación de la digna estirpe de la tierra. Como una aparición no espectral de un ángel materializado: ahí estaba ella, armonizando la consonancia que me traía otra vez a este tiempo presente.
No todo era pasado y ruinas en Capayán. También presente y belleza
Ruinas de Capayán/ monolito y cruz al centro de la plaza

Edificaciones
Ruinas
Fiel corcel que nos trasportó al pasado



Regreso al presente... Ruta y aire cálido en el retorno a la posada del ángel...


No podíamos irnos sin una foto al cartel de ingreso... Ruta N 40 límite entre Famatina y Chilecito, La Rioja, Argentina

Para saber más a cerca de la historia del lugar, reseña del periódico local
http://www.diariochilecito.com/articulo/10104.html

Contentos y satisfechos regresamos a la ciudad
 Luego de haber recorrido los siglos en una visita arqueológica nos encontramos con el siglo XXI en la apacible ciudad de Chilecito "La Perla del Oeste"

















viernes, 2 de noviembre de 2018

Destino... (viaje de locura ll)


"Y el ángel dijo: Déjame, porque raya el alba. Y el hombre le respondió: No te dejaré, si no me bendices. 
Y el ángel le dijo: ¿Cuál es tu nombre? Y él respondió: Miguel.

Entonces el hombre le preguntó, y dijo: Declárame ahora tu nombre. Y el ángel respondió: ¿Por qué me preguntas por mi nombre? Y lo bendijo allí.
Y recordó Miguel el nombre de aquel lugar, Ulapes;  y dijo: Vi al ángel de Dios cara a cara, y luego he hallado el amor... "




Desacostubrado ya a compartir el lecho me sobresaltó del sueño la caricia tierna de una mujer con el recordatorio de la geografía y el azote del sol estival.


Ensillé la Cafetera y salí a la ruta seguido del auto gris...


¡Menos mal que hice caso a las recomendaciones del playero en Ulapes! La ruta estaba es pésimas condiciones y en algunos lugares en obra. De noche hubiera sido una calamidad teniendo en cuenta el cansancio y la experiendia que traía. 
Fui escoltado por el auto gris hasta Santa Rita, donde nos detuvimos y desayunamos... 
Yo sólo la miraba y ella me miraba y sonreía. Su amiga intentaba una conversación que caía en el eco del silencio de años, de casi toda una vida. (por lo menos la mitad de una vida)


Soy leyenda... rodando por las tierras del "Chacho Peñaloza"

En Olta el clima aún es agradable... Sigue mi cabeza dando vueltas entre la vigilia y el sueño. ¿Qué de lo vivido es realmente tangible y qué sólo fue ensoñación?



No lo puedo creer... Dios mío, Sos vos!!!???
Un alto en el camino... — en La Rioja Province, Argentina.
 
Santuario del "Padre Angelelli"
Los Colorados. Venía parado en la moto. No me alcanzaban los ojos para mirar!!!
Los Colorados (Refugio del Chacho) — en La Rioja Province, Argentina.



 La ruta, la mañana y la temperatura ambiente iba aumentando... en un momento comienzo a ver color cepia y borroso. Decido hacer un alto bajo el primer árbol que encontré. Dejé la moto sobre la banquina así al notar mi ausencia y regresar el sobresalto de las mujeres del auto gris era menor.








Finalmente llego a Chilecito, en un viaje de más de 1.500 km. y más de veinte años (pero en otro sentido)


Cristo del Portezuelo... Chilecito, La Rioja. Argentina